«Nuestra querida e inolvidable hermana Sor Mariana, que hace dos días fue llamada a formar parte de los elegidos de Dios a recibir el premio de los bienaventurados: “tuve hambre, y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber; fui forastero y me acogiste; estaba desnudo y me cubriste; enfermo y me visitaste; en la cárcel y viniste a verme”. Todo esto se cumplió en nuestra hermana que como verdadera y fiel Hija de San Camilo siguió las huellas del gigante de la caridad. Siendo una fiel hija de María partió a la patria celestial un 11 de febrero, día en que celebramos la fiesta de la santísima vírgen de Lourdes y Jornada mundial del enfermo. Quienes tuvimos el privilegio de conocerla más de cerca, estamos edificados por sus virtudes, en particular por su alegría, su sonrisa habitual, entrega abnegada, su mirada transparente y su caridad exquisita, siempre tan educada y sencilla, siendo verdadera madre, amiga y hermana para todos los que se le acercaban, dispuesta a escuchar y acoger a todos sin hacer diferencia.
Se identificó siempre como una hermana alegre simple y sencilla que sabe llegar a todos pequeños, grandes y ancianos. Hasta el cielo querida sor Mariana que los ángeles y los enfermos que tú cuidaste con amor.»
Se identificó siempre como una hermana alegre simple y sencilla que sabe llegar a todos pequeños, grandes y ancianos. Hasta el cielo querida sor Mariana que los ángeles y los enfermos que tú cuidaste con amor.»
Burnas tardes.
RispondiEliminaPodrían decirme en que lugar descansan los restos de Sor Mariana.